lunes, 16 de marzo de 2009

ATOMIZADOS


El comportamiento social que nos caracteriza últimamente es el individualismo.


A lo sumo, un arranque colectivo puede llegar a juntarnos en alguna esquina o para cortar el paso de los autos en rutas y calles.



Nos juntamos los familiares de victimas para pedir justicia


Nos juntamos los jubilados para que no nos tiren a la basura


Nos juntamos los gays para pedir que nos acepten.


Nos juntamos los pobres para pedir que nos den.


Nos juntamos los desocupados para que nos den trabajo


Nos juntamos los trabajadores para pedir que nos paguen


Nos juntamos los contribuyentes para pedir que no aumenten


Nos juntamos los que tenemos para que no nos saquen


Nos juntamos los que no tenemos para que nos den



Y así infinidad de intereses de minorías podrían describirse.



En un momento determinado, nos juntamos.



Pero nos juntamos cuando ya nos han jodido, siempre parece que nos juntamos tarde.



Y nunca dejamos de ser minorías. Estamos atomizados, o a lo sumo colectivizados.



Este fenómeno de dispersión, favorece a los de siempre, a los que aprovechan que los que estamos en el llano nunca nos ponemos de acuerdo. Nunca vemos el fondo comun que tienen nuestras vidas variadas



Y por que será?


Es fácil, la palabra es interés.



No me interesa el reclamo de familiares de victimas, mi gente esta viva conmigo


No me interesa el reclamo del jubilado, yo no soy jubilado


No me interesa el reclamo del gay, yo no soy gay.


No me interesa el reclamo del pobre, yo no soy pobre.


No me interesa el reclamo del desocupado, yo tengo ocupación.


No me interesa lo que pide el trabajador, yo estoy bien con mi trabajo.


No me interesa lo que reclaman por los impuestos, yo mientras pueda pago.


No me interesa lo que reclaman los que tienen, a mi no me han sacado nada.


No me interesa lo que reclaman los que no tienen, yo estoy bien con lo que tengo.



Estamos enfermos de individualismo, hasta que nuestros intereses no son afectados, todo nos importa un corno. Tenemos la sensación de que a nosotros nunca podría pasarnos aquello o lo otro.



Y por que? Nos creemos tan buenos? Acaso los otros han merecido sus problemas?



No existe posibilidad de salida sin masificar los intereses.


La lucha de las minorías debe ser respetada, pero nunca será alcanzada sino se alcanzan y respetan las luchas que deben unir a las masas total del pueblo.



Y uno de ellos, creo que el primero y principal, es la lucha por la vida misma. Por el respeto a la existencia.



Ninguna lucha minoritaria por justa que sea tendrá sentido si la vida ha perdido su sentido.


En nuestros días el valor de la vida es tan relativo como subjetivo. Al que se le ocurre te mata.



Nuestro pueblo esta atomizado, individualista, absorbido por el consumismo burdo y decadente que día a día nos inunda y nos vuelve mas dependientes.



Caminamos en línea recta al canibalismo.



El ser social deberá renacer entre nosotros, la defensa de la vida es el primer paso para poder defender luego cualquier otro interés.



Si no existe el respeto por la vida misma, no levantemos otras banderas en vano, pues ninguna puede ser más básica que esta.



Sino, correremos el riesgo de ser destrozados por la realidad. Como el quijote fue derrotado por los molinos.



Reencontremos los sentidos, reencontremos el sentido de la vida.

DIEGO DOBLER

1 comentario:

  1. La falta de educación en el respeto y en la solidaridad y la equivocada consigna del "sálvate tu mismo" es lo que lleva a las sociedades sin familia a la decadencia... Luchemos por la vida y la familia como primera educadora de los valores...
    Seguí con ésto Diego, seguí...

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