viernes, 14 de junio de 2013

NO TE NECESITO

Racionalmente no te necesito para vivir.
Mi cuerpo conserva sus funciones vitales por otros medios.
Al invierno lo paso abrigándome
Y al verano poniéndome a la sombra.

Mis ojos ven a colores y huelo bellos aromas
Siento las caricias, me rasco si me pica
Saboreo la comida e inflo mis pulmones
Y para nada de eso te necesito

Escucho las canciones que me gustan
Mi virilidad carece de problemas, o al menos de reclamos
Las deudas no se me agrandan
Y el auto mientras tenga nafta y batería, arranca.

Aprendí a reírme solo, cocinarme solo, lavar mi ropa
Me estiro cuan grande es mi cama, me baño y canto bajo la ducha
Trabajo, leo, juego y corro tras una pelota
Y para nada, nada de eso te necesito.

Tantas, tantas cosas han pasado, pasan y pasarán
Seguiré adelante haciendo todo lo que pueda
Y para ninguna te necesito,
Para ninguna.

Pero aunque racionalmente, no te necesito
Te elijo con todo mi sentir
Porque simplemente, nada de aquello para lo que no te necesito
Tendría sentido si no estuvieras a mi lado.


DIEGO DOBLER.

sábado, 19 de enero de 2013


QUE QUIERES...



Y que quieres que te diga

si aún me duele tu despedida

sin adiós...



y que quieres que te diga

si quedó vacío el minuto final

el último cruce de miradas



y que quieres que diga

si me desangra ese instante

que nunca se dió



y que quieres que diga este mortal

que cree que volverá a verte

pero no pudo decirte hasta luego



que que quieres que te diga

si ahora ya no hace falta decir nada

si ese minuto ya pasó



y que quieres que haga

para aguantar la lágrima

y el dolor en la garganta



y que quieres que te pida

que quieres que espere

que puedo decir para mejorar mi silencio de hoy



y que quieres que haga

mas que hundirme en tus recuerdos

y atesorarlos contra el paso del tiempo



y que quieres que suplique a Dios

si lo pedido

ya no fue escuchado



ya se, no quieres nada

ya no.

solo me esperas, solo me cuidas



ya se, no esperas nada

como nunca esperaste

como siempre fuiste



y que quieres que haga

si simplemente

te extraño...



DIEGO DOBLER

martes, 18 de septiembre de 2012


QUE NO TE CONVENZAN


QUE NO TE CONVENZAN
PALABRAS NOSTALGICAS
CARGADAS DE SUEÑOS AJADOS
CON ALAS CANSADAS DE MORIR
 
QUE NO TE CONVENZAN QUE EXISTE
LO QUE NO ESTA EN NINGUNA PARTE
LO QUE MARCHITO Y ARRASADO FUE

POR LA TORMENTA FINAL
 

QUE NO TE CONVENZAN
DE VUELTAS O RETORNOS

A LUGARES QUE YA NO EXISTEN

SI ES QUE ALGUNA VEZ EXISTIERON

 

QUE NO TE CONVENZAN DE IR
AL SITIO DEL QUE PARTISTE

SI LA RAZON PARA VOLVER
NO ES MAS FUERTE DE LA QUE TE EXILIÓ

 

QUE NO TE CONVENZAN GRISES ANGELES
CON PALABRAS GASTADAS

CON VERSOS AGRIADOS
CON RECUERDOS MORIBUNDOS

 

NO QUIERAS NUNCA VOLVER
A LO QUE YA NO EXISTE

ATESORA ALGUN BUEN RECUERDO
Y NO TE OLVIDES DEL DIA EN QUE PARTISTE

 

NO QUIERAS NUNCA VOLVER
A LO QUE YA NO EXISTE

PORQUE TE PERDERAS EN UN VIAJE INTERMINABLE
Y VOLVERAS TU VIDA UN CRISOL DE GRISES

 

DIEGO DOBLER

martes, 3 de julio de 2012

UN DIA

Un día descubrí que era pequeño
No era un niño, digo que era pequeño
Un hombre pequeño en un universo infinito
Tan infinito como yo pequeño

Un día aprendí de lo finito que es todo
De lo corto que es todo
De las faltas de tiempo
De la escasa duración de todo

Desde entonces, nada es igual
Y el equilibrio a veces se vuelve utopía
En una punta la ansiedad
En la otra el pesimismo

Encerrados estamos con nuestras ansias eternas
En un envase perecedero
En un contexto amenazante
Entre el cielo y el infierno con los pies en la tierra

Solo encontré una fuerza capaz
De justificar esfuerzos
De dar vida y voluntad
De generar optimismo y razones

Un día descubrí que todo termina
Sin saber cuando ni como
Dejando mil preguntas
Que nos son comunes a todos

Pero un día también supe del amor
Infinito como nuestro ser
Con las mismas ansias de eternidad
Lleno de fuerza, de implacabilidad

El amor es el cómo y el porqué luchar
Es la causa y el medio
Es la forma y la espada
Es el principio y el mejor final

Quizá sea cierto, no somos nada
Pero sin un gesto de amor en la vida
Ni siquiera una huella en la arena
Seremos capaces de dejar

DIEGO DOBLER

martes, 21 de junio de 2011

DEL LIBRO "A ORILLAS DEL RIO PIEDRA..." DE PAULO COELHO

LO SIGUIENTE ES DEL LIBRO "A ORILLAS DEL RIO PIEDRA ME SENTE Y LLORE" DE PAULO COELHO.

"...A veces nos invade una sensacion de tristeza que no logramos controlar,...Percibimos que el instante mágico de aquel dia pasó, y que nada hicimos. Entonces la vida esconde su magia y su arte.

Tenemos que escuchar al niño que fuimos un día, y que todavía existe dentro de nosotros. Ese niño entiende de momentos mágicos. Podemos reprimir su llanto, pero no podemos acallar su voz.

Ese niño que fuimos un día continúa presente. Bienaventurados los pequeños, porque de ellos es el Reino de los Cielos.

Si no nacemos de nuevo, si no volvemos a mirar la vida con la inocencia y el entusiasmo de la infancia, no tiene sentido seguir viviendo.

Existen muchas maneras de suicidarse. Los que tratan de matar el cuerpo ofenden la ley de Dios. Los que tratan de matar el alma tambien ofenden la ley de Dios, aunque su crimen sea menos visible a los ojos del hombre.

Prestemos atención a lo que nos dice el niño que tenemmos guardado en el pecho. No nos avergoncemos por causa de él. No dejemos que sufra miedo, porque está solo y casi nadie lo escucha.

Permitamos que tome un poco las riendas de nuestra existencia. Ese niño sabe qeu un día es diferente a otro.

Hagamos que se vuelva a sentir amado. Hagamos que se sienta bien, aunque eso signifique obrar de una manera a la que no estamos acostumbrados, aunque parezca estupidez a los ojos de los demás.

Recuerden que la sabiduría de los hombres es locura ante Dios. Si escuchamos al niño que tenemos en el alma, nuestros ojos volveran a brillar. Si no perdemos el contacto con ese niño, no perderemos el contacto con la vida..."

martes, 17 de mayo de 2011

A NIDIA

Los ángeles existen, algunos tenemos la suerte de ser rescatados por uno de ellos durante la noche más oscura.
Pero los ángeles un día vuelven con Quien los envió.
Y a veces la noche vuelve y es oscura
Y el frio es más frio
Y la soledad más grande…..
…………………………………………………………………………………………………………………………………………………
Sin adiós
Te fuiste sin adiós
Sorprendida en tu soledad
Por la sombra del final

En tus ojos el brillo
En tus ojos la angustia
En tus pies la arena
En tus pies el agua

Y caminaste hacia el encuentro
De Tu amor
Para alejarte por siempre
Del dolor

Y te alejaste
Dejando atrás tu corazón
Para encontrarte con lo que un día
Se te perdió

Sin adiós
Niña frágil, sin adiós
Con tu risa franca
Con toda tu luz

Me quedan las huellas de tus abrazos
La paz inmensa de tu presencia
El recuerdo imborrable de un llanto
Que supiste calmar

Y estas acá y allá
No te olvidaran jamás quienes te amaron
No te olvidaran
Quienes te traicionaron

Solo te pido algo más
Desde mi más puro egoísmo
Se mi ángel a partir de hoy
Te necesito tanto

Y algo más
Te pido perdón si alguna de mis ausencias
Alimento tu soledad
Sabes que siempre me extravío


Amiga mía, ángel mío
Aunque no te vea
Sé que estas en todos lados
Un corazón no se equivoca
Y tu presencia en mi vida es eterna

Hasta el próximo abrazo
Amiguita mía…angelito mío


DIEGO DOBLER

viernes, 29 de abril de 2011

ZOO-SENSIBILIDAD

Entre muchas sensibilidades, la que respecta a los animales en general y a nuestras mascotas en particular, es una muy importante y marcada en mi vida.

Disculpen si estas declaraciones toman un tono muy personal, no trato de imponer posturas, solo intentare describir un sentir, en este caso el mío.

En esta tarea no voy a enfrentarme a teorías científicas y racionales. Yo no tengo porque discutir racionalmente mis sentimientos. Seria absurdo hacerlo.

Por eso, aprovechando la cualidad intransigente de los sentires, me postulo algunas creencias (como dije al principio acerca de los animales en general y las mascotas en particular) y las pongo a vuestra honorable consideración:

Creo que sienten: mas allá de lo físico, creo que son capaces de sufrir muchos de nuestros dolores espirituales. ¿Acaso no extrañan, no son celosos, no esperan, no se alegran, no se entristecen?.

Creo que aman: SÍ. Después de todo no hay un solo ser humano capaz de definir con certeza al amor y sus variantes, por eso me siento con derecho a creer ciertamente que saben querer.

Creo que entienden: independientemente de nuestros métodos de adiestramiento, cuantas veces hacen cosas que jamás les hemos indicado.

Creo en ellos: ¿cómo no creer? ¿Acaso cuentan nuestros secretos? ¿Nos exigen con presiones las cosas? ¿Nos abandonan cuando les somos indiferentes? Quizás sus limitaciones naturales no les permitan hacer mas por nosotros, pero siento que son capaces de hacer todo lo que pueden y eso es lo máximo que podemos pedirle a cualquier ser.

Creo en muchas cosas mas en las que me gusta creer, en detalles diarios, en alegrías y enseñanzas que me generan.

Yo no sé si sentir estas cosas es normal para los hombres racionales, pero en definitivas uno no puede evitar sentir. Además en estas cuestiones tengo la tendencia a creer mas en lo que se siente que en explicaciones frías y calculadas.

No es mi objetivo discutir las teorías evolutivas de las especies, ni siquiera examinar electro encefalogramas para determinar si sienten, aman, sufren. No lo haría con nadie que me demostrara amor en su accionar.

Sé que el amor existe en la expresión y en la acción, las palabras adornan pero los hechos son los que cuentan al final. Entonces yo creo en el amor que los animales nos dan.

Será porque es imposible para mi no ver miradas en sus ojos, alegría en sus rabos, sonrisas en sus dientes, besos en sus lambidas, manos en sus patas, voces en sus ladridos o llantos en sus aullidos.

El hombre se dice superior y se demuestra primitivo, se dice racional pero no actúa siempre así, se dice inteligente y comete varias veces el mismo error, se dice fuerte y llena su especie de suicidios y depresión.

En fin. Yo soy de la especie humana y comparto con las demás el mismo creador. Sé que ejercemos el dominio pero no considero necesaria la tiranía, creo que si Dios creó tantas especies es porque le habrá parecido bien y no me considero nadie para mortificar innecesariamente a nuestros hermanos menores de la creación.

Soy sensible a ellos y no quisiera perder eso nunca, ya que esto me hace sentir beneficiado y en mas de una ocasión me reconcilio con la vida jugando en el suelo entre pelos, lamidas y colmillos.

Quizás alguien pueda enojarse porque pueda parecer que de alguna manera los estoy humanizando. Solo diré que no puedo disculparme por lo que siento y en segundo lugar, a como van las cosas y nuestro comportamiento como especie, si deseara humanizarlos los primeros en ofenderse deberían ser precisamente los animales

DIEGO DOBLER.

martes, 26 de abril de 2011

ESTOY VIVO, AUNQUE NO CONSTE EN EL BANCO.

......... Durante dos días, el empleado de un banco intento primero ubicarme y luego convencerme de lo importante que seria para mí y para mi futuro, aceptar aquel crédito que me ofrecían con la acostumbrada sospechosa generosidad que tienen los bancos.

El muchacho hacia su trabajo, y por cierto que lo hacia muy bien. Tal es así que en algún momento estuve tentado a aceptar un ofrecimiento de algo que no quería y no había ni siquiera pensado en pedir. No porque me sobrara nada, sino más bien quizá por falta de “audacia económica”, para ponerle un nombre.

Como en principio le hice entender que no había pensado en préstamo alguno y que no tenia intenciones de endeudarme, comenzó a esgrimir otro argumento.

Era increíble, tenía al menos cinco formas distintas de decirme lo mismo, todo de corrido y sin trabarse. En ese momento pensé que podía muy bien dedicarse a locutor, aunque me reserve el pensamiento por temor a que creyera que no lo estaba escuchando. Eso seria irrespetuoso de mi parte.

Aunque en realidad, esto último no era tan erróneo dado que como a muchos, cuando una persona nos habla de corrido, sin dejarnos meter bocadillo alguno y recitando algo en forma casi automática, tendemos a escuchar solo las primeras frases y luego nuestro pensamiento se dispersa, sobre todo cuando la conversación es telefónica.

La cuestión es que aunque yo no necesitara aquel dinero, aceptar su propuesta era sumamente beneficioso para mi vida según él, pues pasaría yo a tener un antecedente crediticio que me resucitaría a la vida económica.

Debo confesar que lo pensé. Estar muerto o no existir es una idea que aun no he considerado seriamente. Aunque sea en el campo económico.

Pero finalmente, y en un bache que me dejo en su discurso, con voz firme logre decirle que no, que no y que no. Todo con absoluto respeto, desde ya.

El hombre se vio vencido por mi negativa y se despidió de mí, no sin antes lamentar lo que yo estaba desperdiciando en aquel momento y hacerme sentir como si se me practicara una especie de eutanasia económica. Al fin cortamos.

Mientras mi oído se desinflamaba, al igual seguramente que su garganta, una idea quedó dando vueltas en mi cabeza.

Una idea que no tiene que ver ni con el insistente empleado bancario, que no hace mas que cumplir con su trabajo; ni conmigo en particular.

Tiene que ver con ese sistema que nos inculca la idea de que la existencia depende de lo que se tiene, de los movimientos en el cajero, del poseer una cuenta o una tarjeta. Sistema donde es obvio que la condición humana es lo menos importante. Un planteo que nos llega a meter miedo de convertirnos en NN financieros, en desaparecidos económicos.

El dinero existe y hace falta, es cierto, pero me parece horrible la idea de que nuestra identidad se vuelve de plástico, la honestidad se demuestre consultando nuestro saldo disponible y ser alguien solo si consta en alguna planilla donde mi nombre se escribe con el numero de cuenta de alguna caja de ahorro.

En fin. Luego del trabajo, llegue a casa y me mire en el espejo. Era yo y estaba allí, tangible. Mi madre estaba terminando de cocinar, mis perros aguardando una caricia, mi cama esperando por mi fatiga, un amor en el corazón y unos libros que están a la mitad de leídos.

Estaba vivo en esa vida que, por suerte, es la que más me interesa. Una vida en la que se gana y se pierde, en la que se tiene y se carece. Se sufre, se disfruta.

Pero más allá de todo, estaba vivo en una vida que, a pesar de las cíclicas crisis de existencia que sufre mi billetera, es la verdaderamente importante y ningún banco me la podría dar por 12 cuotas de 98 pesos mas intereses por mes.


DIEGO DOBLER

jueves, 21 de abril de 2011

¿QUIEN PUDIERA?

¿Quién pudiera conocer la oración perfecta?

La que nos conecte en línea directa con Dios

La que nos arroje alguna certeza en este mar de espanto e incertidumbre

La que responda esas preguntas de miles de años, que aún nos ahogan

¿Quién pudiera hablar cara a cara con Jesús?

Para hallarse en sus ojos

Para preguntarle tantas cuestiones

Para conocer su visión de las cosas

Para tener una idea de cuántas pascuas mas deberá soportar la humanidad antes de encontrarse con el amor y tomarlo como ley

Si las calles están llenas de crucificados que caen mas de tres veces y no sabemos cuál de ellas será la ultima

Si la traición sigue siendo moneda corriente

Si la fe se monopoliza y maneja hasta convertirse en elemento de poder y manipulación

Jesús: ¿Cuánto han cambiado realmente las cosas? Si te dieras una vuelta por nuestra realidad….

¿No deberías discutirles de nuevo el proceder a los sumos sacerdotes?

¿No deberías echar nuevamente a los mercaderes del templo?

¿No deberías sacudirnos de la modorra que los vicios generan en nuestra alma?

¿No deberías volver a mirarnos a los ojos para decirnos que si estamos libres de culpas arrojemos la primera piedra?

¿Porque cargos serias juzgado en esta época?

¿Qué poder te condenaría?

¿Cuántos latigazos de esos serían dados por mi mano?

¿Quién clavaría tu cuerpo en la cruz?


Jesús: para unos Dios, para otros profeta o simple hombre; Y las luchas por discutir quién tiene la razón acerca de tu naturaleza les ha hecho perder a los hombres la esencia de tu mensaje.

¿Quién pudiera conocer la oración perfecta?

La que le demuestre a los hombres que más allá de lo que quieran creer de vos, si fuiste Dios, profeta, pastor, hombre, si tuviste amores, hermanos o que sé yo cuantas cosas mas; Permita hacer entender que has sido el personaje más revolucionario de la historia de la humanidad. Y solo hablando de amor.

¿Quién con menos elementos materiales que vos fue capaz de una revolución tan grande?

¿Quién pudiera escribir la oración perfecta?

¿Quién pudiera hablarte cara a cara?

¿Quién pudiera preguntarte tantas cosas?

Entender porqué verdad pelean los hombres, si la única verdad es el amor. Verdad que a veces olvidamos o confundimos.

¿Cuántas crucifixiones más, cuántos coronados de espinas más, cuántos latigazos, cuántas caídas, cuántos clavos, cuántas lanzas atravesando humanidades, cuántas agonías, cuántas muertes?

Si pudiera escribir la oración perfecta te pediría algo para empezar

Enseñanos a resucitar, porque de agonías estamos llenos y caminamos entre charcos de sufrimientos.

Danos una mano en esto de aprender algo de cada pascua que en la vida nos toca pasar, porque sino viviremos cargando cruces viejas que se hacen cada vez más pesadas, juzgados por los mismos poderes, prejuicios y maldades que a vos te mandaron a matar.

Jesús: ¿Quién pudiera conocer la oración perfecta? Al menos para saber hasta cuando la pasaremos sobreviviendo en esta jungla moderna que no es muy distinta a la que te toco PADECER a Vos.


DIEGO DOBLER

martes, 19 de abril de 2011

PRE--POTENCIA

ENTRE EL VENCIMIENTO QUE PASÓ
Y EL OTRO QUE VA LLEGANDO
EL MES PASA VOLANDO
Y LA VIDA SE VA CON ÉL

ESTAS COSAS MERCANTILES
HAN ACOBARDADO MI LÍBIDO
YO QUE ANTES LLEGABA A TRES
AHORA SUFRO CON EL STRESS

EN MI CABEZA
BOLETAS Y VENCIMIENTOS
HAN ECHADO A LAS MUCHACHAS
DE MIS FIEBRES JUVENILES

LOS CREDITOS SON
CADA VEZ MÁS DUROS
PERO ESA CARACTERISTICA ECONÓMICA
NO CONTAGIA MI HUMANIDAD

ME VE VUELTO COHERENTE
SUFRO LA IMPOTENCIA
QUE LA REALIDAD VIOLENTA ME GENERA
SUFRO LA IMPOTENCIA
EN FORMA TOTAL Y PLENA

OJALÁ SE PARE ESTA CRISIS
OJALÁ SE PARE ESTA VIOLENCIA
OJALÁ SE PARE ESTA RECESIÓN
OJALÁ, OJALÁ SE PARE

HE OÍDO QUE PASA MUCHO
QUE LA EFERVECENCIA ANDA ESCAPADA
QUE NO SUBE LA MOSTAZA
QUE LOS PROBLEMAS LA AMORDAZAN

HABRA QUE TRATAR DE RESOLVER
ESTE ENTUERTO QUE DESORIENTA
PORQUE ESTOY VIENDO QUE A LA MAÑANA
HAY ALGUIEN QUE A VECES NO SE DESPIERTA

Y NO ES QUE FALTE LA COMIDA
O QUE LOS GUSTOS HAYAN VARIADO
SOLO PARECE QUE EL CEREBRO
POR OTROS ASUNTOS ANDA ANGUSTIADO

ESPERO VOLVER A SER
POR LO MENOS LO QUE FUI
RIGIDO FIRME Y AGUANTADOR
UN HUMILDE SERVIDOR

HABRÁ QUE EXORCIZAR
TANTO FANTASMA EN LA CABEZA
PARA REESTABLECER LA OBEDIENCIA
CON AQUELLA PARTE DE MI EXISTENCIA

PORQUE PIENSO VIVIR UN RATO MÁS
RESOLVER EL DILEMA ES FUNDAMENTAL
PARA QUE VALGA LA PENA LA VIDA
Y APROVECHAR DE ESTE DISFRUTE QUE DA GUSTO
POR EL QUE TODAVIA EL ESTADO
NO NOS OBLIGA A PAGAR TRIBUTO

DIEGO DOBLER.

miércoles, 13 de abril de 2011

SIEMPRE UNA CANCION

Desde que yo recuerdo, en mi vida siempre ha habido alguna canción que describía de alguna manera el momento por el que estaba atravesando. Enamoramiento, amor, desamor, abandono, conquista, rebeldía, protesta, tristeza, festejo, etc.

La música acompaña a los hombres ancestralmente, siempre hay algún ritmo de tambores o al menos un ruido rítmico que alegre las almas desde que habitábamos los árboles o las cavernas.

Siempre una canción.

Para hundirse el puñal en el centro del corazón.

Para festejar la llegada del amor.

Una canción que nos preste alguno de sus versos para incluirlos en nuestro discurso de seducción.

O una canción que no diga nada inteligente pero tenga ese ritmo pegajoso que nos lleva a mover el esqueleto, aunque en algunos casos como en el mío, se tenga un solo hueso.

La música entra en nosotros y nos permite imaginar situaciones mas allá de la idea que haya tenido el compositor al crearla.

Escuchar música es parecido a leer un libro. Nos lleva a imaginarnos nuestro propio video clip.

Y no podemos dejar de mencionar a los lentos. El marco ideal, el fondo perfecto para una escena de amor, pasión o seducción.

Cuando un lento empieza a sonar los enamorados se buscan, se miran, se acercan y mientras se abrazan cierran sus ojos y permanecen en las nubes todo lo que dure la canción o tal vez mas si es que un beso consigue su cometido y los lleva hasta las puertas del mismísimo cielo.

Yo no sé si esto se sigue dando. He oído por ahí que ya los lentos no ocupan un lugar tan preponderante en la movida moderna de los lugares bailables.

En todo caso, no saben lo que se pierden.

Siempre he pensado que una buena canción, es un verso o una prosa llevada a su perfección. Ponerle música a una buena letra, es ponerle alas y darle cielo para que vuele.

Una canción no discrimina entre quienes tienen mas o menos, una canción es para todos los que tengan la gracia de Dios de poder escuchar.
Mientras una canción siga sonando, habrá alguien con ganas de cantar.

Mientras una canción siga sonando, una voz de protesta seguirá levantando banderas de justicia.

Mientras una canción siga sonando, una lagrima luchara contra una sonrisa.

Mientras una canción siga sonando, podremos intentar un vuelo hasta unos brazos.

Mientras una canción siga sonando, tendremos ganas de aprenderla para repetirla.

Música y canciones siempre; en la alegría y en la tristeza, para celebrar la paz o para declarar la guerra, en el amor y en el abandono, para escuchar o para bailar, para recordar eternamente una situación o una etapa de nuestra vida.

Tengo fe de que siempre habrá una canción para cantar y celebro esta certeza.

La certeza de que a un verso le crezcan esas rítmicas alas y al sumársele una melodía consiga lograr esa altura que nos permita soñar con los ojos abiertos y nos haga sentirnos vivos mas allá de que la emoción la exterioricemos por medio de una lagrima o una sonrisa; ya que en cualquier caso significa ni más ni menos que manifestación de vida.

DIEGO DOBLER

jueves, 7 de abril de 2011

¿COMO HARIAMOS?

¿Cómo haríamos para espantar los fantasmas que se empeñan en nublarnos la vista?

¿Como haríamos para atraer la atención de las musas que hartas de nuestra indiferencia nos amenazan con no volver a visitarnos?

¿Cómo haríamos para resguardar la idea de que nada material podrá superar jamás el valor de las cosas simples de la vida?

¿Como haríamos para mantener vivos algunos ideales que a muchos les resultan románticos e infantiles?

¿Como haríamos para seguir creyendo en nuestros sueños y en un futuro?

¿Cómo haríamos para mantenernos parados ante cada golpe que la realidad aplica a nuestras ganas de que algún día las cosas cambien?

¿Como haríamos para mantenernos vivos entre tanta muerte?

¿Cómo haríamos para inventarnos cada día un sueño nuevo?

¿Como haríamos sin el amor y sus mensajeros?

¿Como haríamos para seguir si no existiera gente que nos rescate de nuestros naufragios y nos ponga a las orillas de una playa mansa?

¿Cómo haríamos sin aquellos que nos recuerdan que nuestro corazón aun late bajo el pecho, y que sigue bombeando la sangre que inunda nuestras venas y calienta cada centímetro de nuestro cuerpo?

¿Como haríamos sin aquellos que nos hacen olvidar por un segundo de esa sensación de ser solo un numero, solo uno mas?

¿Como haríamos sin esos besos, sin esos abrazos, sin esa piel, sin ese calor y ese sudor que rebalsa de amor los cuerpos y las almas?

¿Como haríamos sin esa canción, sin ese poema, sin esa palabra justa, sin esa compañía en silencio?

¿Cómo haríamos sin las pruebas que día a día demuestran que lo esencial es invisible a los ojos y de que hay cosas del corazón que la razón no entiende?

¿Como haríamos sin el rescate oportuno que nos salva de las vidas mercantiles y consumistas, de los chismes malintencionados y de los maltratos de los malparidos?




Nuestras vidas, nuestros sueños, nuestras pequeñas utopías, nuestros planes, nuestra paz, nuestra salud, nuestras alas, nuestra tranquilidad, nuestro animo, lo que somos y lo que quisiéramos ser, lo que podemos y lo que intentamos; Todo se pone en juego instante a instante.

Y nuestros minutos se llenan entre la huida de quienes nos tiran para abajo y el rescate de quienes nos llenan el alma, sanan nuestras heridas y recargan nuestras energías.

Somos tan frágiles y somos tan capaces de actos heroicos. Y todo depende de nuestro ser, de nuestro espíritu.

No hay caja de ahorro, no hay propiedades, no hay influencias, no hay nada, nada tan poderoso como el amor, como el contacto con seres que portan un mensaje a nuestro nombre que parece decir “no te rindas, no firmes tu dimisión, el juego no acabo”.

Podemos olvidarnos las llaves de casa o las del auto, olvidar el teléfono o el numero de clave del cajero, podemos olvidar un nombre o una dirección, olvidar la frase que ensayamos en el momento preciso en el que debíamos decirla, olvidarnos las bolsas del supermercado en la verdulería. Podemos olvidar un montón de cosas y nuestra vida no se perdería.

Pero no podemos olvidarnos de aquellos que nos rescatan cada día, que nos reconcilian con la vida, que son tan parecidos o tan distintos, aquellos que queremos conservar por mucho tiempo.

Porque si ese olvido canceroso que borra de nuestras memorias lo verdaderamente importante nos gana la batalla, ¿cómo haríamos luego para continuar creyendo que vivir vale la pena?


DIEGO DOBLER

miércoles, 23 de marzo de 2011

DE LA DISTANCIA.

¿Quién alguna vez, voluntariamente o no, no ha tomado contacto con las sensaciones que genera la distancia?

Alejarse es una experiencia que los seres humanos solemos vivir por diversos motivos y de distintas formas.

A veces buscamos la distancia, a veces la sentimos y a veces es la única forma de salir de una situación que nos apremia.

La distancia podemos verla geográficamente o espiritualmente. Podemos hablar así de una distancia material y de una distancia espiritual.

Cuando se dan distancias geográficas y espirituales aparece la indiferencia.

Cuando existe una distancia geográfica pero una cercanía espiritual conoceremos la nostalgia, extrañaremos.

Cuando la distancia geográfica sea escasa pero la espiritual sea grande conoceremos los amargos desencuentros y desamores.

Pero esta cuestión geográfica o material, y espiritual, están matizadas además con otro elemento generador de distancias: el tiempo.

El tiempo también juega un rol importante en el asunto de las distancias sobre todo en lo espiritual. Reencuentros retrasados, conversaciones demoradas, palabras que se dejan para mas adelante, etc. Todos elementos generadores de una de las distancias más peligrosas: las que se vuelven perpetuas y no dejan ya lugar para cercanías.

Sin embargo, y más allá de todo, muchas veces necesitamos tomar distancia. ¿Quién no ha sentido la tentación de alejarse por sentirse desbordado y aturdido?, y ¿quien no ha partido con la absurda ilusión de que al volver las cosas sean distintas y los problemas sean menos o menores?

Y es que ciertamente no podemos negarle a la distancia esa posibilidad que nos da de mejorar nuestra perspectiva. Pero claro esta que no significa de ninguna manera que a mayor distancia mejor perspectiva, todo tiene su punto.

Cada uno de nosotros carga con sus asuntos haga la cantidad de kilómetros que haga y cuando nuestros problemas son espirituales se nos meterán en la mochila y viajaran con nosotros vayamos donde vayamos.

Osea que la distancia no sirve para huir, o al menos no por mucho tiempo.

La distancia puede ayudarnos con sus virtudes, pero difícilmente nos solucione los problemas en forma total. Sabemos que los problemas se enfrentan, no se solucionan huyendo de ellos.

Pues finalmente, regresamos de nuestro exilio que nos alejo del foco de nuestras angustias, que pudo haber oxigenado nuestro espíritu y permitirnos un tiempo de descanso en la lucha, y en vano será esperar que las cosas se hayan resuelto solas. Mismas dudas internas, mismas diferencias con quienes nos rodean, los mismos niños mendigando, las putas en sus mismas esquinas y la rutina afilándose los dientes para intentar devorarnos de nuevo.

Distancia. Que es amiga, que calma, que mejora la visión, que oxigena, que genera nostalgia, que revaloriza lo que amamos, que destruye unos amores y fortalece otros, distancia estando cerca o estando lejos. Distancia que puede llevarnos hasta nosotros.

Así es esta dama, un arma de doble filo que puede ayudar o castigar, que puede romperse materialmente cuando es material, que puede romperse de acuerdo a nuestra predisposición espiritual cuando es espiritual, o que puede volverse perpetua si no le ponemos un limite de tiempo.

La distancia, otro elemento que puede ayudarnos pero que no podemos tomar como solución final de nuestros problemas. Otro elemento del que debemos cuidarnos para no volvernos sus victimas.



DIEGO DOBLER.

lunes, 21 de marzo de 2011

HUIR: BUEN EJERCICIO. MALA COSTUMBRE

Los seres humanos en mas de una ocasión nos sentimos tentados a emprender huidas, escapadas o fugas.

Nos sucede a veces que algunas cuestiones parecen desbordar nuestra capacidad de resolución.

Frente a algunos problemas que la vida nos plantea sentimos unas ganas muy fuertes de salir disparando tomar el primer avión, colectivo o taxi que nos expulse rápidamente a un lugar del cual, al volver todo se haya arreglado solito.

Hay muchas formas de huir. También nos gustaría emprender un largo sueño y al despertarnos de el, darnos cuenta que ya esta todo bien, que no hay de que preocuparse, que nuestra vida continua con toda normalidad.

Pero no es así. De hecho lo sabemos.

Todos sabemos que la única forma de dar solución a los problemas que la vida puede plantearnos es precisamente enfrentarlos.

Esta es una de esas cosas fáciles de decir, pero tan difíciles de llevar adelante cuando nos toca nuestro turno de actuar.

Es fácil navegar por arroyos mansos y conocidos, donde vamos disfrutando del paisaje, tomando solcito y respirando lentamente los aromas.

Pero así como los cursos de agua, la vida también cambia y en algún momento se pone tumultuosa y difícil de manejar. Se complica la situación cuando enfrentamos paisajes distintos, nuestro bote se sacude y no sabemos donde estamos parados, ni mucho menos donde podemos terminar.

No hay consejos que valgan, no hay palabras que alcancen. Sos vos, tu vida, tu situación. Los seres queridos que te rodean son un tesoro incalculable, es cierto, pero la decisión solo te pertenece a vos.

Por otro lado la eficacia que pueden tener las huidas esta limitada a ganar un poco mas de tiempo, ver mejor las cosas o tranquilizarse.

Siempre que he vuelto de este tipo de escapes, el problema esta ahí, esperándome con su mirada fija. Es mas, creo que en mas de una ocasión ha viajado en mi mochila junto conmigo.

En fin. Seria mas lindo que las cosas se arreglen solas, no?. Pero eso, no es así.

Como ya dijimos antes, a los problemas se los enfrenta.

Parece que una vez mas la cuestión se resuelve en el ámbito de ser equilibrados.

Nadie duda que a los problemas la única forma de solucionarlos es enfrentarlos. Pero también es cierto que no podemos enfrentar los problemas sin saber como, eso seria agrandar el problema.

Por eso quizá huir no este del todo mal, si esa huida se toma como una forma de juntar fuerzas e ideas. Pero nunca podemos tomarla como una solución en sí misma.

En fin, la vida parece ser esto: una constante búsqueda de salidas, se parece a un laberinto, y la única forma de recorrerlo es caminando, esquivando obstáculos y buscando alternativas.

Tal vez una de las respuestas sea encontrar la diferencia entre emprender una huida fugaz y ser un fugitivo.

Huir como herramienta que nos permita ver mejor las cosas, puede estar bueno.

Fugarse con la idea de que nos libraremos de todo lo que nos apremia, no solo es absurdo sino completamente ineficaz.

Pero bueno, cada uno hace con su vida lo que puede, ¿ no?. Aunque me pregunto: vivir como un fugitivo, ¿es realmente vivir?



DIEGO DOBLER(OCTUBRE 2005)

martes, 15 de marzo de 2011

ALGO QUE DECIR.

Siempre he tenido la sensación de que la vida esta plagada de despedidas y retornos continuos.

Plagada de seres que se nos alejan y seres que se nos acercan.

Pareciéramos fatalmente destinados a cruzar nuestros caminos con los caminos de los demás y convertirnos así en viajeros que llegan y se marchan alternativamente.

A veces esas estadías duran mucho y otras veces son solo cruces fugaces o incluso imperceptibles.

Sin embargo no depende del tiempo que duren esos cruces de caminos, lo que los mismos nos dejen marcado en nuestros recuerdos, en nuestra conciencia, en nuestro corazón, en nuestro pensamiento o en nuestro ser.

Todos sabemos que no por fugaces, los encuentros son menos satisfactorios y gratificantes.
Y no por largos son necesariamente placenteros.

No sé bien porque, pero creo que alternativamente recibimos a personas que se acercan hasta nuestra historia y parecieran traernos un mensaje. De la misma forma que solemos ser nosotros los portadores de mensajes para otros.

Y claro esta que toda esta cuestión esta mas allá de nuestra voluntad. En mas de una oportunidad nos hemos preguntado como puedo encontrarme en esta situación o como puedo haberme cruzado con esta o aquella persona.

Somos instrumentos de algún maestro divino que hace y deshace con nosotros a su voluntad.

Pero siguiendo con esos cruces de caminos y con encuentros valiosos o no tanto, hay seres que quisiéramos dejarnos para siempre con nosotros, sin darnos cuenta, quizás, que eso a veces también es imposible. Pues cada uno tiene un camino a seguir y es inevitable que lo siga.

Así, comenzamos a amontonar souvenirs de todos esos encuentros, de experiencias; de todas esas personas que al cruzarse con nosotros nos han dejado una marca, una huella, una palabra que recordaremos siempre; un mensaje.

Personalmente siempre he sentido la obligación de que si alguien coincide conmigo, debe llevarse algo del mí, debo dejarle algo. Aunque no siempre se logra y aunque a veces uno solo fue capaz al final de provocar heridas de las que nos arrepentimos aunque no hayamos tenido la intención.

No sé bien de donde me viene ese pensamiento. Tal vez sea por esa creencia de que nada es tan casual y de que si esos encuentros se dan es por algo, aunque no haya explicación racional para este planteo.

En la vida hay gente que vale mucho y vale la pena conocer y hay otros que son solo contenedores de nada y mejor es perderlos prontamente.

Sin embargo, a pesar de esto ultimo, también de ellos se puede aprender. Yo he aprendido lo que no quisiera ser jamás. Esto no me resulta tan raro, dado que me he dado cuenta que en la vida por lo general uno termina sabiendo lo que no quiere antes de lo que realmente quiere.

También esta claro que a veces uno no tiene nada que decir. Pero aun en esa situación, es mejor un sabio silencio que un discurso de sabiduría berreta.

Vivimos en épocas de encuentros vacíos, fugaces; que solo buscan satisfacciones instantáneas. Conversaciones superficiales donde cada vez importa menos lo que le pasa al otro y solo se trata de conocer alguna intimidad que pueda valer como futura conversación de comadres.

Uno puede elegir. Ser seres vacíos o al menos decir algo que pueda tener un sentido para alguien.

Y conste que no se trata de transformarse en consejeros ni hablar desde pulpitos de sabiduría.

Solo es tratar de encontrar en nuestro interior algo que tal vez alguien que coincide con nosotros esta esperando encontrar, aunque nosotros no lo sepamos y la otra persona ni lo espere de nosotros.


DIEGO DOBLER